El peeling médico es un tratamiento estético realizado por un profesional de la salud, generalmente un dermatólogo o médico estético, que consiste en la aplicación de sustancias químicas sobre la piel para eliminar las capas superficiales o medias de la epidermis y, en algunos casos, la dermis. Este procedimiento tiene como objetivo mejorar la textura, apariencia y calidad de la piel, estimulando su renovación celular y promoviendo la regeneración de nuevas capas de piel más saludables y luminosas.

Los peelings médicos se clasifican en función de la profundidad a la que actúan en la piel, y se utilizan para tratar una variedad de condiciones cutáneas, tales como manchas, arrugas finas, acné, cicatrices, poros dilatados, y otros signos de envejecimiento o daños solares.

Tipos de Peeling Médico

1. Peeling superficial: Este tipo de peeling actúa solo sobre las capas más superficiales de la epidermis, eliminando las células muertas sin causar un daño significativo. Se utiliza principalmente para tratar arrugas finas, piel opaca, y mejorar la luminosidad de la piel. Los ácidos más utilizados para este tipo de peeling son el ácido glicólico y el ácido salicílico.

2. Peeling medio: Este tratamiento penetra más profundamente en la epidermis y parte de la dermis. Es más eficaz para tratar arrugas moderadas, manchas pigmentarias, cicatrices superficiales y algunos tipos de acné. Se utilizan sustancias como el ácido tricloroacético (TCA), que actúan más profundamente que los peelings superficiales.

3. Peeling profundo: Este tipo de peeling llega a las capas más profundas de la dermis y se utiliza para tratar problemas más graves, como cicatrices profundas, arrugas marcadas y daños solares severos. El fenol es uno de los productos más comúnmente empleados en peelings profundos. Este tratamiento tiene efectos más duraderos, pero también requiere un tiempo de recuperación más largo.

Procedimiento

El procedimiento de un peeling médico comienza con una limpieza profunda de la piel, seguida de la aplicación de la sustancia química seleccionada sobre el área a tratar. Dependiendo de la profundidad del peeling, el profesional puede dejar actuar el producto durante un tiempo determinado, lo que puede provocar una sensación de ardor o picazón en la piel. Tras la aplicación, el producto es neutralizado y retirado.

En el caso de los peelings más profundos, el procedimiento se realiza bajo supervisión médica y, en ocasiones, con anestesia local para reducir las molestias. Los peelings superficiales y medios generalmente no requieren anestesia y pueden realizarse en consultorio de manera ambulatoria.

Beneficios del Peeling Médico

• Renovación celular: Al eliminar las capas más superficiales de la piel, se favorece la regeneración celular, lo que resulta en una piel más fresca, luminosa y uniforme.

• Mejora de la textura y tono de la piel: Los peelings médicos ayudan a suavizar la piel y a reducir la apariencia de imperfecciones como las arrugas finas, cicatrices de acné, manchas solares, melasma y poros dilatados.

• Reducción de arrugas y líneas finas: Los peelings, especialmente los de tipo medio, son efectivos para suavizar las arrugas y líneas de expresión al estimular la producción de colágeno y elastina en la piel.

• Tratamiento de manchas y pigmentación: Son eficaces en el tratamiento de hiperpigmentación, como manchas solares o melasma, al acelerar la renovación de la piel y mejorar su tono.

• Mejora del acné y sus cicatrices: Los peelings también son utilizados para tratar el acné activo y reducir la apariencia de las cicatrices de acné, al mejorar la regeneración celular y reducir la obstrucción de los poros.

Consideraciones y cuidados posteriores

• Efectos secundarios: Después de un peeling, es común experimentar enrojecimiento, descamación, sequedad o leve inflamación en la piel, especialmente en los peelings más profundos. Estos efectos son temporales y desaparecen con el tiempo. Sin embargo, en algunos casos puede haber hiperpigmentación o, en raras ocasiones, cicatrices, si no se siguen las indicaciones adecuadas.

• Recuperación: La recuperación varía según el tipo de peeling realizado. Los peelings superficiales tienen un tiempo de recuperación mínimo, generalmente de 3 a 5 días, mientras que los peelings más profundos pueden requerir una recuperación de 7 a 14 días o más.

• Protección solar: Es fundamental aplicar protección solar de alto espectro tras un peeling médico, ya que la piel estará más sensible al sol y puede desarrollar manchas o quemaduras fácilmente. Se recomienda evitar la exposición al sol durante las primeras semanas después del tratamiento.

En resumen

El peeling médico es un tratamiento dermatológico que utiliza agentes químicos para exfoliar la piel y mejorar su apariencia y salud, corrigiendo imperfecciones como manchas, arrugas finas y cicatrices. Al ser realizado por un profesional de la salud, se personaliza según las necesidades del paciente, y sus resultados pueden variar según la profundidad del peeling y la condición de la piel. Es un procedimiento efectivo y relativamente rápido que, además de mejorar la estética, promueve la renovación celular y la producción de colágeno, logrando una piel más joven y saludable.